LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA (1808-1814)

LOS INICIOS DE LA GUERRA

Mientras el ejército francés ocupaba parte de la Península Ibérica, las conspiraciones de la nobleza contra Godoy y Carlos IV se apoyaron al descontento de la población, que se reveló contra el rey en el motín de Aranjuez, en marzo de 1808. Por esto, Carlos IV tuvo que abdicar en favor de su hijo, que pasó a ser el rey Fernando VII.

Napoleón aprovechó esta situación y convocó en Bayona a Fernando VII, Carlos IV y sus familias. Asimismo las clases populares protagonizaron una revuelta contra los invasores franceses el 2 de mayo de 1808, quienes vencieron.

Después de esto, los reyes abdicaron el 6 de mayo en favor de Napoleón, quien nombró rey a su hermano José Bonaparte.

Esto hizo que España se convirtiera en un satélite de Francia.

EL REINADO DE JOSÉ BONAPARTE

Se nombró a José I como rey de España y las Indias.

Napoleón convocó a un grupo de nobles importantes en Bayona, que crearon el Estatuto o Constitución de Bayona, un documento que planteaba cambios en la administración del territorio y del gobierno, rompiendo con las estructuras del Antiguo Régimen, en el que destacó la libertad de prensa y personal, la igualdad de todos los hombres ante la ley, y la inviolabilidad del domicilio. 

Esto contó con el apoyo de los que fueron llamados afrancesados, miembros de la nobleza, la Iglesia, la burguesía y el ejército.

LA RESISTENCIA

Después del levantamiento del 2 de mayo en Madrid, se crearon, en la Península, en las Islas Baleares y Canarias, y en las colonias, unas juntas de Gobierno. Estas eran organismos de ámbito local, formados por miembros elegidos por votación, que querían expulsar al ejército francés y restituir a Fernando VII.

Más tarde, se creó una Junta Suprema Central Gubernativa, formada por delegados de las juntas provinciales. 

Como solución a los problemas anteriores al conflicto, las juntas se plantearon el regreso de Fernando VII.

LAS FASES DE LA GUERRA

Entre junio y noviembre de 1808, el sometent venció al ejército francés en el Bruc. 

Además, un ejército organizado por la Junta de Sevilla, lo derrotó en Bailén. 

Por esto, José I tuvo que abandonar Madrid

De noviembre de 1808 a enero de 1810, Napoleón lanzó una ofensiva para dominar las ciudades principales. En 1810 los franceses ocuparon Andalucía.

Entre enero de 1810 y 1814 continuaron las victorias francesas, pero cuando Napoleón marchó hacia el frente ruso en 1812, perdieron apoyo francés. Los aliados, al mando del duque de Wellington, realizaron una ofensiva que marcó el final de la guerra con la expulsión del ejército napoleónico.

A finales de 1813, con el Tratado de Valençay, Napoleón devolvió el trono a Fernando VII, quien volvió a España en marzo de 1814.